ELPOLÍTICO NACE, NO SE HACE CON ESTUDIOS

EL TÍTULO DE POLÍTICO SE CONSIGUE EN LA CALLE,
NO EN LAS UNIVERSIDADES

Es muy común escuchar entre los candidatos de los partidos, no solo de esta ciudad, sino de todo el país, siempre que se acercan unas elecciones, hablar de que en sus candidaturas siempre contarán con políticos bien formados. Cuando los candidatos hablan de formación, no sabemos si se refieren a una formación real hecha en la calle, que es donde realmente se puede hacer un político, viviendo día a día los problemas reales de los ciudadanos o se refieren a una buena formación académica, que en ocasiones, puede ser bueno, pero no siempre, de hecho no es motivo para que una persona con titulación académica, ejerza mejor la política que otra persona que no haya estudiado una carrera.
El presidente del gobierno de Brasil, Lula da Silva, salió huyendo de la hambruna de su barrio en Pernambuco. Comenzó a trabajar de limpiabotas, después en una tintorería, vendió fruta tropical en las calles brasileñas hasta que a los catorce años, consiguió un trabajo en una siderurgia donde trabajaba hasta doce horas diarias. Comenzó a estudiar para ser mecánico tornero pero no consiguió terminar sus estudios al tener un expediente académico más bien malo. Sus adversarios políticos le atacaban diciéndole al pueblo que un mecánico tornero no podría representar a un país, o sea, al igual que en España, los políticos arrinconan a quienes saben y pueden trabajar, solo porque no tienen una formación académica. Aquí son más finos a la hora de decirlo. Es cierto que en política municipal, se dan casos de personas que no tienen formación académica y son muy buenos gestores, pero hay muchas zancadillas para progresar en política y dar saltos a nivel regional, nacional o europeo. Lula ha demostrado a todo el mundo que en ocasiones, los títulos solo valen para tenerlos colgados en una pared de la casa o del despacho. Para gestionar y luchar por los intereses de un pueblo, uno no tiene por qué ir a la universidad, al instituto o al colegio. Hay muchas mujeres y hombres en esta ciudad y en este país, capaces de gestionar mejor que nadie los intereses del pueblo sin que hayan pasado por universidad alguna, sin embargo, los “formados”, no les abren paso, tal vez, por miedo a que se demuestre que son mejores, tal y como ha pasado en Brasil. Lula da Silva, el que fuera limpiabotas, termina su mandato colocando a Brasil como octava economía mundial, superando así a España, donde todos los presidentes de gobierno y políticos de altura, son titulados universitarios. El amor a su tierra, el compromiso con su pueblo y su carácter de luchador, han hecho de este político un referente a nivel mundial de quienes han pasado años y años estudiando una carrera para acabar en un partido político. Nadie mejor que una persona que ha sufrido y ha luchado de verdad con la crueldad de la vida misma para tomar las riendas de un buen proyecto político, o al menos, formar parte de un proyecto político en donde los intereses, sean realmente mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Lula da Silva, ha demostrado tanto amor que se emociona cada vez que habla de sus logros. Fue increíble ver como se expresaba cuando alcanzó por primera vez el gobierno y espetó a todos sus detractores, que se mofaban por su falta de formación, “y yo, que durante tantas veces fui acusado de no tener un título universitario, consigo mi primer diploma, el título de presidente de la República de mí país”. Ahí es nada. Con tesón y Fe en uno mismo, todo se logra. Deberían tomar nota los políticos en esta ciudad y en este país. Hay mucho potencial sin título universitario que desafortunadamente para muchos, son los mejores preparados para hacer frente a los problemas de los ciudadanos, comprender realmente sus inquietudes y luchar por un presente y futuro mejor. Lo de Lula, no tiene nombre ni calificativo. Cincuenta millones de personas mejoraron su calidad de vida, veinte millones salieron de la pobreza, 31 millones ascendieron de escala social, es el primer socio comercial de China, aspira a tener un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU y se ha codeado con los primeros mandatarios del mundo. Lula ha demostrado que los “pobres”, “desfavorecidos”, los que solo cuentan para los votos de los “titulados” en este y en todos los países, también pueden dirigir las riendas de su futuro, porque afortunadamente en España al igual que en Brasil, cualquiera puede presentarse en unas elecciones al nivel que quiera. En una entrevista a Lula, entre lágrimas, una de las mayores satisfaciones que se lleva como presidente de Brasil, fue la de recibir a personas necesitadas en el Palacio Presidencial, “hubo un día en que recibí a los que viven en la calle. Les pregunté qué reivindicaban y me respondieron: ‘No queremos pedir nada. Sólo queremos decirle que nuestra mayor conquista es el hecho de estar ahora dentro del Palacio del Planalto’. Ellos jamás pensaron que iban a entrar”. Muchos directores generales, muchos cargos de confianza, muchos directores de medios de comunicación, muchos titulados, en ocasiones, ineptos para todo lo que le manden. No todos son iguales, pero esto es una muestra muy importante para que se quite el miedo o la vergüenza de quienes no cuentan con personas sin formación para gestionar las riendas de una ciudad, una comunidad o un país. Lo importante son las personas, sus ideas, sus convicciones, las ganas de trabajar y conseguir un mundo mejor. va siendo hora, sobretodo la izquierda de este país, de tener en cuenta a estas personas, no solo para pedirles el voto. Gracias Lula, por demostrar tanto.

PROPUESTAS CONTRA LA CRISIS

PROPUESTAS CONTRA LA CRISIS

Para que los parados de larga duración, no se vean sin nada y totalmente desprotegidos, para reducir el déficit público y para, en definitiva, asegurarnos el Estado de Bienestar que nos quieren robar, hago las siguientes propuestas: 1.- Reducir a la mitad o más, el número de coches oficiales en las administraciones (con ello ahorramos gastos en comsbutible, seguros, mantenimiento y horas extras de conductores). 2.- Suprimir teléfonos móviles oficiales (que solo utilicen teléfonos oficiales cargos públicos electos y no personal de confianza). 3.- Suprimir gastos en dietas (llevar bocadillos, comidas en tapes o comer en casa, como cualquier trabajador). 4.- Suprimir hasta que supremos la crisis, las cantidades millonarias que muchos funcionarios reciben al margen del sueldo que perciben (en el ayuntamiento de Mérida, por ejemplo, los hay que cobran más de 20 mil euros al año además del sueldo), todo un despropósito en estos tiempos. 5.- Controlar más el gasto de luz (tirar de lo "ajeno", no duele). 6.- Suprimir los gastos en cursos que no sirven para nada y realizar verdaderas acciones que abran las puertas al empleo. La gente quiere trabajar y necesita trabajar, buscarse la vida para tener independencia y cubrir necesidades y no perder el tiempo en charlas en las que cuentan lo que todos sabemos. 7.- Controlar más las bajas laborales de algunos/as funcionarios/as (todos sabemos que no todos/as son iguales, pero hay mucho aprovechado/a). 8.- Reducir el coste de publicidad institucional. 9.- Controlar el uso de vehículos de las administraciones ya que muchos funcionarios los han utilizado en alguna ocasión para hacer las compras en el DIA o Carrefour. Yo los he visto. 10.- Surpimir las pagas extras de políticos y cargos de confianza. Estas sí serían medidas serias y bienvenidas por parte de la población. Recortar de quien menos tiene para dejarlo sin nada, es intolerable.