¿POLICIA LOCAL DE MÉRIDA IDEM CONTROLADORES AEREOS DE BARAJAS?

La actual crisis, está llevando a España a tomar unas medidas que hace un par de años, eran inimaginables. Opiniones para todos los gustos y según la situación de cada persona, pero si para algo nos ha servido esta crisis, ha sido para que por fin, tanto políticos como cargos de confianza y en algunos casos, ciertos funcionarios, comiencen a vivir como el resto del pueblo y dejen de gozar de tantos privilegios. Aun queda mucho por hacer y evidentemente, son las altas esferas de la política española, quienes deben dar ejemplo, pero ejemplo real y renunciar a ciertos privilegios de los que todavía disfrutan. A colación de esto, en Mérida, nueve agentes de la Policía Local se dieron de baja el día en el que tenían que trabajar por la seguridad de los ciudadanos en el pasacalle de carnaval, un contratiempo que llegó cuatro días después de la entrada en vigor de la nueva jornada laboral de los agentes aporbada por el Gobierno Municipal. Antes de la entrada en vigor de la nueva jornada laboral, de 37,5 horas semanales, los agentes trabajaban una tarde, descansaban por la noche, entraban a trabajar de nuevo por la mañana, libraban por la tarde y volvían a trabajar por la noche. Después, descansaban tres días y medio seguidos, es decir, trabajaban en tres turnos distintos y descansaban tres días y medio, o lo que es lo mismo, en un mes descansaban unos 15 días y trabajaban otros 15. Siempre me mostré y me mostraré a favor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, por la labor encomiable e intachable que realizan a favor de la seguridad de todos los ciudadanos, pero no se puede permitir que por muy cabreados, molestos o dañados que se sientan con ciertas decisiones, pongan en peligro la seguridad de los ciudadanos que pagamos su sueldo. Hay muchas formas de reivindicar y protestar, las que permiten las leyes y por mucho certificado médico que pudiera haber, la gente no es tonta. Se puede ir al médico diciendo que uno tiene dolor de garganta, cabeza y huesos y el médico te dice que te quedes en casa. Te expide un certificado de visita y hasta la vista. Esta situcaión me recuerda a la de los controladores aéreos de Barajas. La ley es para todos por igual y de la misma manera que en su día la Policía Local de Mérida tuvo un apoyo masivo de la ciudadanía a sus reivindicaciones, en esta ocasión, pueden encontrarse con todo lo contrario, la desaprobación de los ciudadanos que, sin ser gilipollas, tontos o fáciles de engañar, saben que algo extraño muy extraño ocurrió ese día. Por tanto, que se investigue que pasó y a asumir responsabilidades. No se puede jugar con este tipo de cosas porque al final, pagan justos por pecadores, dentro y fuera de la Policía Local.